Aunque Windows 10 hace tiempo que está disponible, la versión Windows Server 2016 sigue demorándose, así que seguimos probando la versión más reciente que al día de hoy es la TP5 (“Technical Preview 5)
Los que disponemos de un ambiente para virtualizar no tenemos problemas para hacer las instalaciones necesarias de esta versión previa, pero todavía hay muchos que no disponen de esa posibilidad
Para los entusiastas que gusten probar esta versión previa, sin virtualizar, sin perder su instalación en uso, y sin necesidad de discos/volúmenes separados es que preparé esta nota
Lo que aprovecharé es la instalación en un disco/archivo VHDX, sin usar virtualización, y que además de las pruebas nos permitirá ver la compatibilidad de hardware, ya que se tratará de “multiboot” seleccionando cada sistema operativo durante el arranque
Importante: antes de hacer ese tipo de pruebas debemos asegurarnos tener copia de seguridad que podamos recuperar, ya sea una imagen del sistema opertivo, o por lo menos de los datos
Partiré de una máquina (virtual) que tiene instalado y configurado Windows 10 Professional. En mi caso es una versión x64, arrancando con UEFI. Aunque no creo que esto influya, por las dudas hago la aclaración
Recordemos que en Windows 10, para hacer un “apagado verdadero” en el momento de elegir la opción debemos tener pulsada la tecla mayúsculas (“Shift”), en mi caso he tomado es precaución
Con la máquina así apagada, monto el ISO de Windows Server 2016-TP5, la arranco y selecciono instalar esta versión servidor
La primeras pantallas del asistente son las normales tal como muestran las siguientes capturas
En mi caso no he incluido clave de activación
Y aunque podría seleccionar cualquiera de las cuatro versiones del sistema, pensando en uso que podría darle más adelante, seleccioné Datacenter con interfaz gráfica
Debemos llegar hasta la siguente pantalla, ya que acá es donde haremos la configuración necesaria, que será crear un archivo VHDX que montaremos para la instalación del servidor
Usamos un “viejo truco” que sigue estando presente desde las primeras versiones de Windows. Si pulsamos May+F10 accedemos a un CMD, ejecutado como administrador aunque aún no está creado, pero que nos permite acceso total al sistema
Lo primero que debemos averiguar es cuál es la letra asignada al volumen donde está el sistema operativo anterior. En el caso que presento es muy sencillo, pero si estuvieran presentes varios discos y volúmenes no sería tan sencillo. Simplemente usando el comando “DIR <Letra:>” cambiando la letra hasta que encontremos la adecuada, en mi caso es C:
Ahora debemos ejecutar
- DISKPART
Para acceder al utilitario de administración de discos - CREATE VDISK FILE=C:\W2016TP5.VHDX TYPE=EXPANDABLE MAXIMUM=61440
Esto nos permite crear un archivo/disco VHDX de nombre “W2016TP5.VHDX” en la raíz del disco “C:\”, de tipo dinámico, y un tamaño máximo de 60GB
Estos datos se pueden personalizar, se podría poner en una carpeta específica, o se podría cambiar el tamaño. Respecto a esto último tener en cuenta que cuando arranque el sistema en dicho disco el archivo tomará el tamaño máximo y debemos tener espacio suficiente - ATTACH VDISK
Para conectar el disco - EXIT
Para salir de DISKPART - Finalmente podemos cerrar la ventana CMD
Refrescamos la información mostrada de discos
Y aparecerá el nuevo disco donde instalaremos el nuevo sistema ;)
No voy a poner las capturas de el proceso de instalación, lo supongo conocido, pero luego del reinicio veremos que nos ofrece la posibilidad de elegir el sistema operativo a arrancar, y finalizar la configuración del nuevo sistema. Por supuesto que selecciono Windows Server 2016
Con el comando WINVER podemos ver la versión instalada (TP5)
Desde cualquiera de los dos sistemas podemos elegir cuál de ambos arrancará por omisión, y cuánto tiempo nos dará para seleccionar
Comentaba más arriba, que hay que tener en cuenta el tamaño del disco VHDX asignado, pues en el momento que arranque el sistema operativo contenido, éste se expandirá a su máximo tamaño
Pero cuando no está arrancado, como elegí que sea dinámico, tendrá el tamaño de acuerdo a los datos almacenados, en este caso un poco menos de 10GB, como podemos observar desde Windows 10, pero no olvidarse que con la configuración que hice puede crecer hasta 60GB
De esta forma usando arranque múltiple podemos probar el nuevo sistema sin “destruir el actual, sin necesidad de más discos o particiones, y sin virtualizar
Si luego quisiérmos eliminar esta nueva instalación, alcanzaría con eliminar el archivo VHDX, y seleccionar que por omisión arranque el sistema operativo que queda, con un tiempo de selección igual a cero
Sólo un detalle más que puede ser importante en algún caso, los archivos de arranque quedarán actualizados a la última versión instalada. El motivo por el cual hice la prueba con Windows 10 v1607, fue revisar si esto luego podría traer problemas pues los estaba reemplazando por una versión más vieja (v1511) y aparentemente no hubo ningún problema
Comentarios
Excelente guia Guillermo lo usare en mi blog como referencia
¡Gracias José! :)
De gran ayuda, gracias José
¿José? entonces ya no escribiré más notas para el blog :D
Guillermo buenos días, excelente guía, de casualidad he llegado a tu blog, pero he visto lo interesante de tus notas, sobre todo los procedimiento paso a paso.
Mis felicitaciones por tus trabajos y aportes, son de gran ayuda.Muchas gracias
Slds
JC
¡Gracias Juan Carlos! me alegro te sirvan y te parezcan interesantes:)
Excelente explicacion presisa y contundente sin tanto bla bla
Trato de que todas las notas sean así «paso a paso» qué es lo que hay que hacer para demostrar el procedimiento o la funcionalidad :)